sábado, 6 de agosto de 2011

Algo más que un Abrazo

El abrazo es una necesidad vital que tenemos todos los seres humanos de amar y sentirnos amados. Abrazar es una grandiosa medicina, transfiere energía y da a la persona que es abrazada un estímulo emocional. Según Kathleen Keating, autora del libro “La Terapia del Abrazo”, el abrazo no sólo ayuda a sentirnos bien, también favorece el buen desarrollo de la inteligencia en los niños, a superar los miedos y es un factor anti-envejecimiento. Por otra parte, se dice que necesitamos cuatro abrazos al día para sobrevivir, ocho para mantenernos, y doce para crecer. Un abrazo jamás te hará sentir mal, por el contrario, siempre es sano y reconfortante sentirse abrazado. No olvidemos que la piel es el órgano más grande que tenemos y, por tanto, necesita de mucho, mucho cariño.
Reciban todos un fuerte abrazo,
Ama



El poder de un abrazo
El contacto físico no es sólo agradable, es necesario para nuestro bienestar psicológico, emocional y corporal; acrecienta la alegría y la salud del individuo y de la sociedad.
 Y claro que eso es definitivamente real. Todos funcionaríamos mejor durante el día, si abrazáramos o nos dejáramos abrazar. Si bien es cierto que dar o recibir un abrazo es algo simple y cotidiano, casi todos desconocemos la dimensión de plenitud que nos proporciona.  Los expertos en la materia, tienen mucha razón al decir que "en su forma más elevada, abrazar es también un arte". Una de las formas más naturales y espontáneas de demostrar afectos es a través del abrazo. "Si bien hay muchas formas de tocar, el abrazo es una muy especial y contribuye de un modo muy importante, a la curación y la salud.
El abrazo es asexual y por lo general reconocemos un abrazo cariñoso, consolador o juguetón, del abrazo de pareja. Cada uno tiene muy en claro que tipo de abrazo está dando, ya que el abrazado responderá en el mismo tono. El abrazo se da y se recibe. A veces uno es el abrazado, y otras, el que abraza. Cuando se quiere un abrazo, no hay que esperar a que el otro adivine, es necesario pedirlo.
 Los hijos tienen que ver que sus padres se abrazan entre sí, también a sus amigos, así al crecer, estarán convencidos que es algo que no sólo se da entre amantes y cuando se siente atracción física por otro.
 Este gesto se da en todos los niveles de relación interpersonal. Todos tenemos necesidad de tocar y ser tocados, de amar y ser amados. El amor retenido puede convertirse en dolor. Por ello, en el abrazo hay que ser humildes y vulnerables, para entregarnos él y al abrazo. Al abrazar, afirmamos la capacidad de descubrir la ternura y la alegría que hay en nosotros y la riqueza interior que nos nutre.
 Hay que tener muy en cuenta que el abrazo, es una de las formas más puras de manifestar afecto y cariño, y además, tiene muchos beneficios, como el de aliviar el dolor, la depresión, la ansiedad y la tensión; acrecienta en los enfermos la voluntad de vivir y seguir adelante; ayuda a los bebés prematuros (que se vieron privados de contacto en sus incubadoras), a crecer y a fortalecerse; hace que veamos con mejores ojos nuestra propia persona y el entorno que nos rodea; tiene un efecto positivo en el desarrollo del lenguaje y en el coeficiente intelectual de los niños; provoca alteraciones fisiológicas positivas en quien toca y en el que es tocado; mantiene en buen estado los músculos de brazos y hombros, ya que es un ejercicio de flexión y de estiramiento; afirma que somos seres humanos; es democrático, ya que cualquiera es candidato para dar o recibir un abrazo; crea los lazos más estrechos entre los individuos, ya que rompe las barreras emocionales.
 El afecto, el contacto físico y el cariño, es algo demasiado importante. Es una de las necesidades fundamentales del ser humano, al igual que el agua y el alimento.
 Si bien, en la generalidad, los hombres suelen demostrar con más facilidad su cariño, muchas mujeres quizás lo expresen sin mayor dificultad, pero no siempre sucede así. Puede ser que una barrera emocional impida demostrar afecto o, simplemente, al no haberlo recibido desde pequeñas, sea difícil proyectarlo hacia otras personas. De hecho, es factible que el afecto recibido durante la infancia, determine la manera de darlo en el futuro. Tanto en el hombre como en la mujer, la ausencia de afectos en la infancia, puede marcar definitivamente nuestra personalidad como adultos; una persona que carece de afectos, suele ser rígida, celosa, posesiva y a veces insensible y violenta.
Normalmente, es gente muy dependiente de los demás en sus relaciones, ya sea matrimoniales o hacia sus padres o hijos. Otro de los rasgos de una persona que recibió poco afecto en su vida, es que suelen ser muy pasivas y se caracterizan porque aceptan todo, por miedo a quedar solas.
 Hay diferentes formas de abrazos y hasta llevan nombre.
 En el "abrazo de oso", por lo general, una de las dos personas es más alta, pero tampoco es requisito para aportar la cualidad emocional de este abrazo. El que abraza se curva levemente sobre el más bajo, envolviéndolo con los brazos. El que es abrazado apoya la cabeza en el hombro o pecho del otro y rodea la cintura del que abraza. Los abrazos de oso, se dan entre padres e hijos; abuelos y nietos. Entre amigos y entre esposos. Este abrazo transmite mensajes como: Te apoyo; cuenta conmigo; comparto tu dolor o alegría. Cuando se da en la pareja, se transmite una infinita ternura.
 En el "de mejillas", este abrazo demuestra ternura y bondad y tiene una cualidad espiritual. Se puede dar sentado, de pié o hasta con una persona sentada y otra de pié, pues no se necesita contacto físico total. Si las dos personas están sentadas, deben ponerse de frente y presionar la mejilla contra el otro. Este abrazo se da entre amigos íntimos, entre la pareja o con un ser querido. Es ideal para una ocasión feliz.
 En el abrazo "con forma de A", las personas deben estar de pié, frente a frente y colocar los brazos alrededor de los hombros. El costado de las cabezas queda apoyado en la del otro y el cuerpo está inclinado hacia delante sin que haya contacto debajo de los hombros. Es un abrazo clásico y muy apropiado para las relaciones recientes o cuando se requiere cierto grado de formalidad. Por lo general, se da entre familiares que tiene muchos años de no verse.
 El llamado "abrazo sándwich", formado por tres personas, dos de ellas se colocan frente a frente y el tercero, en medio de los dos. Los dos abrazantes pueden abrazarse por los hombros o por la cintura. Este abrazo proporciona sensación de seguridad y apoyo. Es ideal para compartir en familia (madre, padre e hijo), entre tres buenos amigos o bien,  cuando una pareja desea consolar a otra persona.
 El "abrazo impetuoso", es por lo general breve y se caracteriza, porque el que abraza corre y echa los brazos al cuerpo del otro. El que es abrazado debe estar preparado para responder al apretón y tener una sensación agradable. Otra manera de dar este abrazo, es cuando los dos corren el uno hacia el otro y se estrechan con pasión. Este abrazo se da cuando se dispone de poco tiempo, y se recomienda incluir abrazos más suaves y duraderos para no hacerlos tensos. Se utiliza en un momento en que queremos desearle suerte a alguien para expresar cariño, pero de una manera apurada.
 El "abrazo grupal", les viene bien a los amigos muy íntimos que comparten un proyecto e interés en común. El grupo se coloca en círculo y los brazos rodean hombros y cinturas. Una de las variantes de este abrazo es cerrar el círculo avanzando hacia el centro y luego retroceder separándose con un grito de júbilo o con un apretón de despedida, tal cual en los bailes rusos. Este abrazo proporciona calidad de apoyo, seguridad y afecto, además de un sentimiento de unidad y solidaridad. Es ideal entre compañeros de clase, de oficina o de un equipo.
 El "abrazo de costado", es muy usual darlo mientras dos personas caminan juntas. Pueden estar tomadas por la cintura o por los hombros. Se caracteriza también por ser un abrazo alegre y juguetón. Es apropiado cuando caminamos, paseamos o esperamos en la fila para entrar al cine o al teatro. Este abrazo es común entre la pareja, entre padre e hijo, madre e hijo, entre hermanos y también cuando los buenos amigos desean hablar.
 En el "abrazo por la espalda", el que abraza se aproxima al otro lado desde atrás, rodea su cintura con los brazos y lo estrecha con generosidad. Este abrazo suele ser breve y juguetón y la sensación de fondo es de felicidad y apoyo. Este tipo de abrazo se da entre la pareja, como cuando el hombre abraza a la mujer mientras ella se encuentra haciendo algún quehacer.
 El "de corazón", se considera que es la forma más elevada del abrazo. Se inicia un contacto visual mientras la pareja está de pié, frente a frente. Los brazos deben rodear hombros y espalda y las cabezas se juntan y se establece un contacto físico. Los dos deben concentrase en la ternura que fluye desde un corazón hacia el otro y respirar con lentitud. Es preciso anular posibles distracciones. Éste es un abrazo sublime, largo, afectuoso, abierto y genuino. Puede expresar amor puro e incondicional. Se da entre viejos amigos o amigas muy recientes que se unieron por una experiencia y emoción común y, por supuesto, entre una pareja.
 El "abrazo a la medida", es muy efectivo porque nos hace sentir bien. Aquí entra el factor ambiente, situación, compañía y las necesidades personales del abrazo: afecto, fuerza, apoyo o reafirmación o cualquier sensación agradable que pueda proporcionar el abrazo.
 En el "abrazo Zen", se puede emplear cualquier tipo de abrazo. El de mejilla y el de corazón son los más recomendables. Una de las formas de practicar este abrazo es que la pareja se siente frente a frente y apoyen los pies con pies y manos con manos. No importa si se abren o cierran los ojos, pero la respiración debe ser profunda y con ritmo. La pareja debe estar concentrada sólo en el momento presente y dejar que los pensamientos desaparezcan. Es preciso tomar conciencia de lo que se está compartiendo, del contacto físico y de la energía que se está entregando mutuamente. Cuanto más profunda sea una relajación, mejor será la experiencia del abrazo. Éste es un abrazo que demanda mucha concentración, ya que mucho se entrega y recibe con él.




Abrazoterapia
¿Qué es la Abrazoterapia?
La Abrazoterapia®, al igual que la risa y la música es una más de las muchas herramientas, que la sabiduría de la Naturaleza nos ha regalado y a la que nosotros, en nuestro afán de perfeccionismo inalcanzable, nos hemos dedicado a través de muchos años de férreo entrenamiento a contaminar, desvirtuar y hasta casi por ultimo aniquilar.
A través de la "educación", venimos desde hace siglos destruyendo, este simple y poderoso acto atávico, natural y espontáneo, que es el abrazo.
¿En qué se basa la Abrazoterapia?
El fundamento científico del alto poder terapéutico del abrazo, queda marcadamente de manifiesto en el gesto de la madre cuando toma a su hijo y, al igual que en el alumbramiento o cuando le amamanta, su cerebro se encuentra segregando la maravillosa hormona de la oxitocina, conocida por ser la hormona del "apego". Gracias a ella, el bebe se siente unido a su madre y resguardado de todo peligro.
Pero todavía hay más, en el acto del abrazo no solamente actúa la oxitocina, sino que también, el abrazo activa en el cerebro la liberación de serotonina y dopamina, por lo que resulta fácilmente entendible la razón por la que experimentamos una maravillosa sensación de bienestar, sedación, armonía y plenitud en el momento del abrazo.
¡Recuperemos el poder terapéutico del abrazo!
Sin embargo y a pesar de estas maravillosas razones fisiológicas, cuando hablo de Abrazoterapia®, anhelo humildemente ir aún más allá.
Lo hago pensando en los abrazos como herramientas fundamentales del lenguaje no verbal.
Este maravilloso lenguaje que no conoce de idiomas, que comunica desde la diversidad y sin distinciones, con una alta eficacia las emociones que experimenta nuestro cuerpo y, que nuestros sentimientos quieren transmitir.
"Un abrazo expresa más que 1.000 palabras"
Probada está la utilidad de los abrazos en todas aquellas situaciones en que sobran las palabras o no logramos encontrar las adecuadas.
Los abrazos que desconocen los límites del tiempo y el espacio. No tienen plazo de caducidad, pues basta con cerrar los ojos y mirar en el cajón de los recuerdos, para evocar "aquel" maravilloso momento, y así poder revivir plenamente la sensación del abrazo auténtico.
Con abrazos se tejen abrigos para el alma
¿Abrazo auténtico? ¿O mejor debería llamarlo simplemente abrazo, a secas?
Los abrazos son abrazos y los otros son pseudos abrazos, abrazos impostores que pretenden confundirnos invistiéndose de tales y no quedan más que en el frío y descarnado remedo del acto de estirar y ceñir con los brazos.
Esos no merecen ser llamados abrazos.
Esos no han nacido del corazón y, por lo tanto no están transmitiendo su mensaje.
Resulta altamente interesante, la paradojal situación de que para abrazar, no hacen falta brazos; es posible abrazar con la palabra, con la mirada, con un perfume, una melodía y es posible también abrazar/se a las esquivas olas del mar, a la caricia del viento, la tibieza del sol, la dureza de la piedra o a la sabia del árbol...
Toda la naturaleza se encuentra ávida de ser abrazada y dispuesta permanentemente a prodigarse a nosotros en un abrazo integrador en sintonía con el Universo.
Es por ello que me refiero al abrazo de forma literal, pero también y fundamentalmente de manera metafórica.
El abrazo más que una aptitud es una actitud, una posición frente a la vida.
Podría decirse que estamos refiriéndonos a una forma de ver, a una filosofía de vida.
Es el preguntarnos: de qué forma me estoy relacionando conmigo mism@ y por lo tanto, de qué forma estoy relacionándome con el mundo.
Cuál es mi percepción de la vida...
Porque implica también la responsabilidad de asumirnos como co-creadores de nuestra realidad. En todo momento.
¿En qué nos puede ayudar la Abrazoterapia?
Los Abrazos, dicho así a secas, pero con mayúscula, son fácilmente reconocibles ya que sus beneficios son inmediatos:
Nos rescatan de la soledad y el aislamiento. No estamos solos, no somos el centro del Universo. Somos el Universo.
Guían el auto conocimiento potenciando la autoestima.
Facilitan los desbloqueos físicos y emocionales.
Nos permiten vivenciar la integración de cuerpo, mente y emociones.
Nos ejercitan en la empatía.
Nos sitúan plenamente en el Aquí y el Ahora.
Favorecen la comunicación afectiva con nosotros y con el otro.
Estimulan la gratitud.
Despiertan la creatividad.
Impulsan a una actitud pro-activa en la vida.
Conectan con la intuición.
Favorecen el entrenamiento de respuestas asertivas.
Devuelven la ilusión, la alegría y el buen humor, puesto que la risa es su fiel compañera.
Le brinda reconocimiento y protección a nuestro "niño interior".
Potencia la resiliencia.
Origen e historia de la Abrazoterapia
Los orígenes de la Abrazoterapia® como tal son tan antiguos como el hombre. Existe desde aquella primera madre que al recibir a su hijo, lo coge entre sus brazos atrayéndolo tiernamente hacia su pecho y le sostiene dándole protección. Una protección que todos tendemos a recrear a lo largo de la vida. Sea ofreciendo o buscando unos brazos amorosos.
Compartiendo en definitiva un abrazo de homenaje a la Vida.
Por todo ello, te propongo que en vez de construir muros, que lejos de protegernos, nos sumen en la incomunicación, construyamos entre todos puentes de Abrazos por los que transiten libremente las emociones.
¿Cuántos abrazos has compartido hoy?. Te quiero porque te abrazo.
Lía Barbery
Coach Personal - Abrazoterapeuta, Creadora del Sistema Neurocoaching®
Autora del libro: “El Lenguaje de los Abrazos” Mandala 2007
Colaborador de enbuenasmanos.com
http://www.liabarbery.com



El significado de un abrazo
El abrazo puede ser la búsqueda de una seducción o su culminación, una presencia que no se la convoca, como tampoco a una emoción, y viene, por el contrario, cuando uno menos se lo espera. O la respuesta que estamos siempre condenados a buscar, una iniciación, un término. Hasta cabe la imaginación de pedir ese abrazo y que la respuesta sea, hace ya tiempo que te tengo abrazado.
Tiene una elegancia y un rito del que carece el beso, una profundidad, una duración, un acoplamiento de los cuerpos necesario y exigente. Prefiero que me abracen a que me besen por la entrega que supone, por la comodidad, como quedarse sin vestidos, como si no lleváramos nada, solo el tacto, la postura, casi el hábito en forma de maestría.
Los besos tienen la forma inquieta de las palabras, los abrazos la serenidad y la seguridad de dejar siempre alguno pendiente. Su prestigio no depende ni de su duración ni del contacto. Tienen tanta hegemonía que permiten la única posibilidad de dormir desnudo, para hacerlo solo necesitas que alguien te abrace en un acomodo carnal de lo más confortable.
Si necesito el amor siempre como ser humano, me hace falta el abrazo, ancho, agradable con la presión precisa que necesita cada cuerpo. En mi petición de amor alguien me explicaba una manera de vencer el dolor: suspirando y abrazándose. De esa manera rompe uno el revés del dolor, le queda la desmemoria de la memoria, el territorio prestado de notarse en las miradas; el crecimiento de una madurez joven, la experiencia que se te escurre a veces sino te la soporta nadie, nadie con quien abrazarte.
Quiero cada día mi mejor y mi último amor, no he cambiado, ni cambiaré y me permiten la tozudez. Viviré de esas imágenes como las de los rostros que retoco cada tarde con los filtros gausianos que tienen la delicadeza de evitarme la noche. Vivo y vine para con ese invento que proporciona la vida del abrazo superar los años ya pasados y los que faltan; para abrazado apreciar el peso, el sudor y la edad de la persona abrazada. Me quedo en este andén de escritos míos para contar las cosas cómo las siento: o una aparición recién llegada o la plena historia de uno súbita y profunda.
Seré siempre así, a veces superándolo todo, otras fundido en un sollozo porque uno es mucho más hombre cuando llora cierto, seguro, inconsolable, sin que le puedan quitar ya el motivo. Luego tiene que venir el suspiro, el abrazo con un significado deslumbrante, abrumador. Ése es el término: o abrumas y deslumbras abrazando o deja los brazos sueltos porque no pueden servirle a nadie.
En cualquier novela de esa literatura inabarcable que quiero abarcar un día, en ese aprendizaje que jamás daré por concluido hay abrazos que arrebatan las caderas de una hembra; que traspasan el tabique de una lujuria bien ganada; hay una somnolencia de animales satisfechos; una forma de quemar todas las mentiras de la vida y convertirlas en deseo. En el abrazo hay un lenguaje de la piel cuando la piel se entrega, un intencionado cautiverio vulnerable, como una especie de llegada a la última parada.
-¿No me abrazas?
-Hace tiempo que te tengo abrazado.
inventandomelavida.blogspot.com


FRASES DE ABRAZOS
*Creo sólo en lo que puedo tocar, besar o darle un abrazo. El resto es solamente humo. Edward Paul Abbey

*Un beso, 
dos abrazos, 
tres caricias me darían, cuatro veces mi alegría y en
quinta sinfonía de mi 
sexto pensamiento, 
siete veces te daría las letras de un TE QUIERO.

*La brecha que hay del odio al amor, entre un hombre y una mujer, se mide con un abrazo de reconciliación.

*Hay abrazos tan siniestros que producen escalofríos.

*Con los besos se demuestra la pasión, mientras que con los abrazos transmitimos el cariño.

*Fundirse en un profundo abrazo con cualquiera que esté cerca, no cambiará, tal vez, este mundo individualista, pero sí quedará impreso para siempre en aquel lugar más allá de nosotros, más allá de nuestra soledad.

*Cuantas veces un abrazo dice y reconforta mucho más que mil palabras.

*Un abrazo es un apretón de manos desde el corazón.


AbrazosGratis.org no es una asociación, ni una ONG, ni una empresa, es una web mantenida solidariamente para ayudar a difundir y unir a las personas que compartimos la misma actitud: ofrecer ABRAZOS GRATIS para dar felicidad.

















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